Sarai Rua una mirada diferente sobre una problemática que nos incumbe a todos

Sarai Rua es fotoperiodista residente en Barcelona, España. Su trabajo es un testimonio de una realidad silenciada: las casas ocupadas por inmigrantes sin papeles. Y así, con su pieza audiovisual, abre las miradas y nos hace conocer historias muy cercanas a nuestras propias casas, pero muy lejanas a nuestro día a día.



RnM: ¿Por qué tuviste la iniciativa de hacer éste documental?
SR: Este documental surgió de la necesidad de hacer visible una realidad a menudo ocultada o maquillada por los medios y las instituciones en una ciudad que muere por proyectar una imagen artificial de sí misma. Sentí la obligación moral de documentar y dar voz a una comunidad con mucho que decir que a menudo topa desgraciadamente ante una sociedad sin ganas de escuchar.

RnM: Tu documental tiene una forma distinta de enseñar una situación factual en comparación a los grandes medios. Habla un poco sobre eso.
SR: Trabajar de forma independiente permite reportar con libertad, tanto de crítica como en la forma.

Mi manera de trabajar es muy intuitiva, me dejo impresionar por un acontecimiento y trato de captar aquello valioso y capaz de transmitir mejor esa realidad tal i como yo la entiendo. Poder dedicarle el tiempo necesario para conocer esa realidad es crucial para poder hacer un juicio mejor sobre ella. A menudo los grandes medios no disponen de este tiempo y están más preocupados por tener que rendir cuentas, que de la calidad de la información que manejan.

RnM: ¿Cómo es la cuestión de los inmigrantes en Barcelona?
SR:La situación en Barcelona para los inmigrantes es del todo desfavorable. El paro, la pérdida de derechos laborales y de bienestar, los fuertes recortes y subida de impuestos han hecho estragos en toda la población, y la inmigración lo ha sufrido muchísimo. Desde las instituciones no se plantean soluciones reales ni convincentes y se eluden responsabilidades sobre los que se encuentran en peor situación, obligándoles a vivir en un bucle de miseria y persecución donde siempre parten de zero. Muchos se están dando cuenta de que ni Barcelona ni España son ahora mismo un buen sitio donde prosperar, y después de años de trabajo, y de inmensos esfuerzos por la supervivencia e integración aquí, finalmente, decepcionados con el trato recibido, no ven otra salida que volver a su país o probar suerte en otro.